Pasamos una gran parte de nuestra vida trabajando, por eso nuestro lugar de trabajo debería tener un ambiente que nos permita desarrollarnos a nivel personal y laboral. Pero esto no es siempre así, hay casos en los que puede darse el conocido como acoso laboral o mobbing laboral. Saber qué hacer ante una situación de este tipo es imprescindible.
¿Qué es el mobbing laboral?
Las situaciones de acoso en el ámbito laboral tienen como objetivo principal acabar con la autoestima de la víctima, en muchos casos buscando además que la misma decida renunciar a su trabajo voluntariamente.
Puede provenir de personas que se encuentren en cualquier escalafón de la empresa. Será acoso vertical si se da entre personas entre las que existe una relación de jerarquía y horizontal si se da entre compañeros de la misma categoría laboral.
El mobbing laboral engloba todas aquellas conductas constitutivas de acoso que puedan menoscabar la autoestima de la víctima. Puede tratarse de:
- Insultos o críticas emitidas a nivel público.
- Molestar al trabajador incluso durante su tiempo libre con llamadas, mensajes, etc.
- Dejar al trabajador sin tareas para desmotivarlo.
- Desbordar al empleado con tareas para generarle estrés.
- Separar físicamente el puesto de trabajo de la víctima del resto de compañeros.
Mobbing laboral ¿qué hacer?
Lo primero que hay que hacer es vencer el miedo. Muchas veces los afectados no quieren hacer pública la situación por miedo a perder su trabajo. Reconocer que existe un problema es el primer paso para poner fin a una situación que de no pararse a tiempo puede afectar incluso a la salud física o psíquica.
Siempre es recomendable que la víctima recoja pruebas de lo que le está ocurriendo. A fin de poder demostrar que sus acusaciones son ciertas.
Denuncia ante la empresa
En los casos de acoso laboral es importante contar con asistencia legal especializada desde el principio para no saltarse ningún paso.
En primer lugar hay que denunciar lo que está ocurriendo ante la propia empresa. La mejor forma de hacerlo es exponer la situación por escrito, aportar las pruebas que se tengan (copia de las mismas, nunca los originales) y remitir ese escrito al departamento de Recursos Humanos, al de Riesgos Laborales o directamente ante la dirección. También es conveniente informar a los representantes de los trabajadores en la empresa.
Denuncia en vía administrativa
Si la empresa no toma medidas para poner fin a la situación se puede optar por poner los hechos en conocimiento de la Inspección de Trabajo. Este organismo llevará a cabo una inspección en la empresa y si estima que el denunciante tiene razón puede imponer la sanción correspondiente.
Denuncia en vía judicial
Como último recurso se pueden denunciar los hechos en vía judicial. En función de lo que haya ocurrido se podrá acudir a la jurisdicción Social (lo más habitual) o incluso a la Penal si los hechos son constitutivos de delito. También queda la vía de la jurisdicción Civil para reclamar la responsabilidad civil del acosador.
El asesoramiento de un abogado es esencial en estos casos para elegir la vía jurisdiccional en la que se va a actuar.
Muy util, gracias