El bullying en la escuela es un problema que afortunadamente cada vez se hace más visible, lo que permite buscar nuevas formas de luchar contra él. Aunque también es cierto que para poder erradicar esta lacra se requiere la colaboración de alumnos, profesores, padres y de la Administración Pública.
Aunque no existe, a día de hoy, una norma que obligue a los centros educativos a tener un programa de actuación en caso de detectarse supuestos de acoso escolar, la mayoría de ellos ya están tomando medidas tanto preventivas como reactivas.
Medidas preventivas para evitar el bullying en la escuela
La prevención de las conductas de acoso escolar pasa por una correcta educación de los niños. Cada vez es más frecuente que en los centros educativos se hagan charlas sobre este tema impartidas por especialistas.
La visita de psicólogos, de miembros de la Policía e incluso la experiencia de personas que han pasado por este problema, es la mejor manera que tienen los alumnos de concienciarse sobre este problema.
El objetivo de las charlas es triple:
- Conseguir que los abusadores sean conscientes del daño que causan con sus conductas.
- Animar a los niños que sufren bullying a denunciarlo.
- Concienciar a los alumnos de lo importante que es denunciar las situaciones de acoso de las que tengan conocimiento.
Medidas reactivas para evitar el bullying
Cuando se ha detectado un caso de bullying se ponen en marcha medidas reactivas que pueden variar según el centro educativo. Las más habituales suelen consistir en la prestación de ayuda psicológica al afectado y la separación entre el acosado y el acosador, ya sea mediante la expulsión de los acosadores o mediante su cambio de clase.
¿Qué pueden hacer los padres frente al bullying en la escuela?
Cuando los padres tienen conocimiento de que su hijo o hija está siendo acosado lo primero que tienen que hacer es comunicarlo al colegio. Debe establecerse a partir de entonces una comunicación continua que permita a los progenitores estar al tanto en todo momento de lo que se está haciendo para ayudar a su hijo.
Pero a veces no existe un programa de reacción frente al acoso en el centro educativo, o las medidas que se toman no son suficientes. En estos casos los padres deben reclamar ante la Inspección Educativa para que sea ella la que tome medidas y sancione al colegio o instituto si considera que no está actuando bien.
En los casos más graves no es descartable acudir a la vía judicial, para conseguir medidas que hagan efectivo el cese del acoso y conseguir además una compensación por los daños causados.
¿Cómo reaccionar frente al acoso a un hijo?
El bullying es una situación muy grave que afecta profundamente al niño, por eso es importante que los padres reaccionen de la forma más pacífica posible. En estos casos es muy recomendable ponerse en manos de un especialista en Derecho que se encargue de aconsejar a los padres sobre los pasos que tienen que dar en cada momento. Con el objetivo de resolver la situación lo antes y lo mejor posible.
Si te interesa saber más sobre este tema, no te pierdas estos artículos sobre cómo demostrar el acoso escolar y dónde denunciarlo.
gracias por la informacion
gracias
Gracias me ha sido muy util